Muertes sospechosas en los alrededores de Seattle hacen presagiar una nueva amenaza para Bella. Victoria sigue intentando vengarse de ella y está reuniendo un ejército para destruirla. A pesar de su odio ancestral, los Cullen y los Quileutes tendrán que acordar una tregua y unirse para poder salvar a Bella. Al mismo tiempo, ella se ve obligada a elegir entre su amor por Edward y su amistad con Jacob sabiendo que su decisión puede volver a desatar la guerra entre los dos clanes. Mientras el ejército de Victoria se acerca, Bella tendrá que enfrentarse a la decisión más importante de su vida.